domingo, septiembre 14, 2008

Fin de semana

Esta semana también estuve en oficina, léele y léele y viendo datos, conociendo un poco del SHII y aburriéndome un poquito. Sin embargo, como Eloy estuvo, no estuve taan aburrida, por lo menos alguien con quien platicar horas y horas.

Desde el martes estuve quedándome en casa de Valery, porque se fue con su famila a San Francisco de vacaciones y pues le estoy cuidando la casa, aunque prácticamente me la pasé en casa de Arturo, porque después del trabajo me iba para allá y ya en la noche Eloy me traía a la casa.

El viernes por fin hice el cambio oficial de mis cosas al depa de Eloy, donde viviré, sólo que las dejé ahí botadas, porque hasta el martes voy a estar aquí y ya después me cambiaré oficialmente al depa, aunque por lo menos dos semanas creo que voy a estar sola, porque Eloy anda de viaje y quién sabe hasta cuándo regrese.

El sábado fue a comprar mi primer despensa y pues sí salen más cariñosonas las cosas. Habré comprado como 600 pesos mexicanos, cuando mucho 700 y pues aquí fueron 122 dólares. Lo bueno es que Adelina me hizo el paro y no tuve que pagarlo de sopetón, pero pues sí me quedé con la boca abierta, porque se me hizo mucho mucho muchote. Aunque por una parte tiene razón Adelina, se me hace más caro porque todavía ando con precios mexicanos, pero si se hace la compraración del salario mínimo de allá y el de acá, pues no es tanto.

Y pues eso fue lo más interesante del sábado. El domingo, o sea hoy, fui con Arturo y su familia a un pueblo padrísimo, de lo más bonito del mundo, así tipo pueblito de Gilmore Girls. New Hope se llama el lugar y pues es bastante pintoresco, para caminar y comerse un helado o en la tarde-noche ir a los barecitos que hay de a montones. También es un pueblo bastante visitado por los motociclista, había harrrrrrrtos. También gente muy extraña, que decía uno, hay güey, de dónde saliste.

También miles y miles de tienditas curiosonas, de antigüedades, de velas, de ropa rara, mediavales, de muchas muchas cosas, donde había chucherías muy padres, pero muuuuuy caras. De hecho estaban unos jabones que decían eran los preferidos de Oprah, pero cada cochino -bueno, bastante limpio y agradable- jaboncito salía en 8 dólares, jamássssssssssss.

Y cremas para las manos riquísimas, que no podía dejar de olerlas, pero 12 dólares, gracias, pero no gracias.

También hay un trenecito que te pasea por los alrededores, que se veía bastante bonito, pero pues no nos subimos.

Hay un puente que puedes cruzar a pie, cuyo río divide a Pennsylvania de New Jersey, así que en un tiempo estaba en PA, pero 5 minutos después en NJ. Ohhhhhhh

De ahí nos fuimos a otro lugarcito que era un mall, pero todas las tiendas en casita, muy bonito. También outlet por cierto. Como ya era tardezón, no pude entrar a todas las tiendas, pero a las que entré estaban muy accesibles, los descuentanzos del mundo y te daban cupones de 5 dólares para comprar en otras tiendas, pero como ya era la hora de cerrar, me quedé con 15 dólares que no pude gastar, diablos!!

De ahí fuimos a comer-cenar, porque ya eran las 6 y media, algo así, a un lugar de hamburguesas, Chopper no sé qué y pues ahí dos triques, según el lugarcito estaba muy recomendado por un crítico de un periódico, pero ya después Arturo aclaró que ese güey recomendaba todos los lugares.

Y pues ya, de regreso a casa, a chismear un rato y después me vinieron a dejar aquí. Mañana me tengo que levantar tempranísimo, porque Adelina tiene la intención de salir a las 7:30 a Pac, así que a esa hora pasará por mí, diablos y pensar que este fin los dos días me estuve levantando tardísssssssssssimo, pero güeno, se hará lo posible para estar lista a tiempo. Zasssssssss



Más fotos cuando encuentre mi bluetooth.

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