La semana pasada por fin fui a mi primera prueba, en una planta nuclear en Seneca, SC. El trabajo padre, iniciándome en el mundo de las pruebas. El viaje pesadón, fueron 15 horas, pero entretenido y lo mejor de todo, por primera vez manejé una van, por primera vez manejé de hecho sola y por primera vez manejé sola en los iunaites, porque tuvimos que rentar un carro para movernos y así poder dejar la van en la empresa. Nos volvimos a quedar en Clemson y esta vez no me resistí a tener mi taza de Go Tigerrrrrrrrrrsssss... y obvio mi llaverito de la garrita.
De ahí supuestamente tendría que regresar a PA, pero salió un trabajo en Cincinnati y pues otro viajecito de 9 horas o más. Llegamos como a las tres de la mañana a un pueblo de Kentucky y ahí dormimos y después al día siguiente, iniciamos de nuevo el viaje a Georgetown, OH, como a 1 hora de Cincinnati, pero tardamos un poco más porque nos equivocamos de camino. Dios bendiga al GPS, te saca de cualquier apuro.
El trabajo en ese lugar fue con otra técnica, inspección a tuberías, enterradas y lloviendo, así que no fue lo más limpio que pudiera decir, pero estuvo bien bien, aprendí cómo se hace para evaluar las tuberías sin tener que parar el tráfico y levantar carreteras. Wooaaaaaa De ahí, terminamos tardezón y al día siguiente también teníamos que hacer algo parecido pero en otro pueblo, así que había que buscar hotel para dormir esa noche y he ahí el descubrimiento del año. Hay una página que es como que apuestas por un hotel y dices cuánto das y el hotel acepta o rechaza tu precio. Es por eso que pudimos descansar en un Hyatt en el centro de Cincinnati, por la hermosa cantidad de 60 dólares....woaooooooo, dios bendiga a esta página también! Lastima que andábamos cansadones y no pudimos dar una vuelta por Cinncinati, aunque la vista del hotel era muy padre, se veían los edificios y el centro de la ciudad. Al día siguiente otro trabajo de lo mismo y el regreso a pennsilvania, otras 12 horitas en carretera, pero también me pude echar mi manejadita por una zona montañosa, así que puras curvas y pasar por 3 túneles. Descubrí que tengo que pegarme mucho a mi izquierda en un tunel, porque no es lo mismo un carrito compacto que una van y casi me llevo el espejo, pero no sucedió, eheheheh.
Del viaje de regreso lo que más me impresionó fueron los árboles. En esta parte de los iunaites son muy marcadas las estaciones, entonces de hecho en el otoño las hojas cambian de color para después en invierno caerse por completo. Y qué bárbaro, había unos rojos, amarillos y naranjas tan intensos, como de película. Me encantó en naranja, se veía tan padre y hasta brillaba y toda la carretera cubierta de árboles multicolores. Lástima que no llevaba cámara, pero fue genial, fue algo impresionante y cautivador.
También de regreso pasamos a una juguetería, porque Martín tenía que comprarle algo a sus niñas y no pude resistir la tentación de comprarme a Elmo tickles... es MA-RA-VI-LLO-SO. Puedo pasar horas y horas tocándole su pancita y no cansándome de oirlo reír y verlo como se arrastra, patalea y se para, lo adoro... aunque me voy a tener que separar de él, para regalárselo a mi primito, lágrima. Mañana salgo rumbo a México, dos semanss en Cd. del Carmen, por fin tacos, familia, México... Espero que no haga mucho calor en Carmen, pero también lo disfrutaría mucho, porque las cosas ya se están poniendo frías aquí. Espero no perderme en el JFK y que de Newark pueda agarrar el Shuttle sin problemas y que no me la hagan de tos en la aduana. Ya veremos... Zassssss...
De ahí supuestamente tendría que regresar a PA, pero salió un trabajo en Cincinnati y pues otro viajecito de 9 horas o más. Llegamos como a las tres de la mañana a un pueblo de Kentucky y ahí dormimos y después al día siguiente, iniciamos de nuevo el viaje a Georgetown, OH, como a 1 hora de Cincinnati, pero tardamos un poco más porque nos equivocamos de camino. Dios bendiga al GPS, te saca de cualquier apuro.
El trabajo en ese lugar fue con otra técnica, inspección a tuberías, enterradas y lloviendo, así que no fue lo más limpio que pudiera decir, pero estuvo bien bien, aprendí cómo se hace para evaluar las tuberías sin tener que parar el tráfico y levantar carreteras. Wooaaaaaa De ahí, terminamos tardezón y al día siguiente también teníamos que hacer algo parecido pero en otro pueblo, así que había que buscar hotel para dormir esa noche y he ahí el descubrimiento del año. Hay una página que es como que apuestas por un hotel y dices cuánto das y el hotel acepta o rechaza tu precio. Es por eso que pudimos descansar en un Hyatt en el centro de Cincinnati, por la hermosa cantidad de 60 dólares....woaooooooo, dios bendiga a esta página también! Lastima que andábamos cansadones y no pudimos dar una vuelta por Cinncinati, aunque la vista del hotel era muy padre, se veían los edificios y el centro de la ciudad. Al día siguiente otro trabajo de lo mismo y el regreso a pennsilvania, otras 12 horitas en carretera, pero también me pude echar mi manejadita por una zona montañosa, así que puras curvas y pasar por 3 túneles. Descubrí que tengo que pegarme mucho a mi izquierda en un tunel, porque no es lo mismo un carrito compacto que una van y casi me llevo el espejo, pero no sucedió, eheheheh.
Del viaje de regreso lo que más me impresionó fueron los árboles. En esta parte de los iunaites son muy marcadas las estaciones, entonces de hecho en el otoño las hojas cambian de color para después en invierno caerse por completo. Y qué bárbaro, había unos rojos, amarillos y naranjas tan intensos, como de película. Me encantó en naranja, se veía tan padre y hasta brillaba y toda la carretera cubierta de árboles multicolores. Lástima que no llevaba cámara, pero fue genial, fue algo impresionante y cautivador.
También de regreso pasamos a una juguetería, porque Martín tenía que comprarle algo a sus niñas y no pude resistir la tentación de comprarme a Elmo tickles... es MA-RA-VI-LLO-SO. Puedo pasar horas y horas tocándole su pancita y no cansándome de oirlo reír y verlo como se arrastra, patalea y se para, lo adoro... aunque me voy a tener que separar de él, para regalárselo a mi primito, lágrima. Mañana salgo rumbo a México, dos semanss en Cd. del Carmen, por fin tacos, familia, México... Espero que no haga mucho calor en Carmen, pero también lo disfrutaría mucho, porque las cosas ya se están poniendo frías aquí. Espero no perderme en el JFK y que de Newark pueda agarrar el Shuttle sin problemas y que no me la hagan de tos en la aduana. Ya veremos... Zassssss...
1 comentario:
i like......
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