Caí en la tentación... no pude soportarlo, tenía mucha hambre. Si no hubiera ido al cine hubiera seguido con mi dietecita, pero por más que busqué plátanos y leche en todas las tiendas que hay por el cine, nunca encontré nada que no me hiciera pecar. Así que comí casi una crepa entera y palomitas... aunque para serle un poquito fiel, mi botella de agua... ja!
Lo único bueno del asunto, fue que mi tentación fue completamente gratis... porque cancelaron la función que quería ver y nos devolvieron el dinero de los boletos y de todo lo que habíamos comprado en las tiendas del cine: palomitas grandes, refresco grande, una crepa y una botella de agua.
Lo malo es que ni siquiera pequé por ver una película, así que mejor no hubiera ido al cine y así no hubiera roto la dieta a tan pocos días de terminar, después de tanto esfuerzo.
Bueno, lo bueno es que ya estoy más consciente que mis lonjitas no van a desaparecer para este fin, así que ya no me traumaré tanto y disfrutaré la rica carne que hoy me toca.
3 comentarios:
vamos es un dia, si ya no viste la pelicula pero tomalo como el pla de las 24 horas, caiste pero solo reponte y adelante.
Muchos saludos
No hagas dieta. Las lonjitas son lo de hoy.
Mmmm... ya no seguí la dienta. Tacos y hamburguesas al por mayor pasaron por mi panza. Entonces confiaré en el ganso y apostaré por mis lonjas
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